Reproducción asistida, un derecho restringido; sin marco normativo: GIRE
CIUDAD DE MÉXICO.
De los 79 mil 10 procedimientos de reproducción humana asistida que se han solicitado en la última década en las cuatro instituciones públicas donde se practican en el país, sólo han realizado 35% es decir, 27 mil 970.
De acuerdo con el Grupo de Información en Reproducción Asistida (GIRE), en México muchas personas que, por diversos motivos, requieren de un procedimiento de este tipo son rechazadas del sector público por atender criterios que violan los derechos humanos y que van desde la edad hasta el estado civil.
Por ejemplo, después de tres años de vida en pareja, María Teresa decidió que quería ser madre y durante dos años buscó un embarazo de manera natural, pero no lo consiguió. Como le era imposible pagar un tratamiento de reproducción asistida en una clínica privada acudió al ISSSTE, en donde le diagnosticaron infertilidad primaria y la canalizaron al Programa Integral de Reproducción del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre.
Sin embargo, a los pocos días le comunicaron que no sería posible referirla, porque la edad límite para ingresar a ese programa es de 35 años y ella en ese momento había cumplido los 36.
En México, a pesar de que desde hace más de cuatro décadas se realizan técnicas de reproducción humana asistida en clínicas y hospitales públicos y privados, hasta este momento, no existe un marco normativo integral que regule, a nivel general, el acceso y práctica de estos procedimientos reproductivos, lo que produce incertidumbre jurídica para las partes involucradas y abre la puerta a actos arbitrarios y discriminatorios contra quienes buscan servicios de reproducción asistida en México”, advierte GIRE.
En su informe El camino hacia la justicia reproductiva: una década de avances y pendientes, la organización señala que dada la ausencia de una regulación general que norme el acceso a las técnicas de reproducción humana asistida, los requisitos de acceso a cada uno de los hospitales y clínicas que proporcionan estos servicios varían, pero en general, todos contienen elementos discriminatorios que resultan preocupantes.