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Kevin Kelsy, el venezolano del Shakhtar que podría ser el ‘terror’ del Barcelona

El ‘9’ de los ‘mineros’ se convirtió en el jugador de su país más joven en marcar en Champions

La invasión de Rusia sobre Ucrania dejó al Shakhtar Donetsk sin ‘samba’. El rival del Barcelona en Champions sólo tiene en plantilla tres brasileños (Pedrinho, Eguinaldo y Newerton) cuando llegó a acumular una quincena. Los ‘mineros’, sin embargo, mantienen, en la medida de lo posible, su apuesta por incorporar talento extranjero: el venezolano Kevin Jesús Kelsy Genez (Valencia, 27-7-2004), incluido por ‘Tuttosport’ en la lista inicial de 100 nominados al ‘Golden Boy’, es el último ejemplo.

Kelsy, que debutó en Primera con Mineros de Guayana en 2021, con sólo 16 años, no marcó… pero llamó la atención en el último Sudamericano sub 20. De hecho, había fichado con Boston River, que acabó revendiendo su pase al Shakhtar.

Este ‘9’ zurdo, de 1,93 metros de estatura, debutó a lo grande en la pasada Europa League: marcó el quinto y decisivo penalti que permitió al Shakhtar eliminar al Rennes y acceder a octavos. «Es un sueño hecho realidad. Debut y clasificación», escribió en ‘Instagram’.

«Tiene algo especial. Juega sin miedo, con el corazón. Ha ido mejorando y con 18 años ya ha marcado goles clave. Tiene habilidad para decidir el rumbo de los partidos», aseguraba su exentrenador Igor Jovicevic.

«Con 18 años ya ha marcado goles clave. Tiene habilidad para decidir el rumbo de los partidos.» Igor Jovicevic

Kelsy, que suma nueve goles y dos asistencias en 870′ de juego con el Shakhtar, también estrenó en Champions a lo grande. Su golen la derrota contra el Oporto (1-3) le convirtió en el futbolista venezolano más joven (19 años, un mes y 23 días) en marcar en Liga de Campeones. De hecho, sólo hay tres jugadores sudamericanos más precoces a la hora de marcar en la máxima competición europea a nivel de clubes: Messi, Rodrygo y Santa Cruz.

El «sacrificio y la disciplina» son las bases de su éxito. Kelsy cuida mucho su alimentación y trabaja un preparador personal desde su etapa en Mineros de Guayana. Sobre el césped procura «ser intenso y aportar movilidad en ataque tirando muchas diagonales».

Ya en Venezuela, después de cada entrenamiento, se quedaba 15 minutos más. «Me gusta practicar remates y fortalecer mis debilidades, como la pierna derecha o perfeccionar mi remate de cabeza», reconocía.Así, de cabeza, llegó, precisamente, su gol al Oporto. Que tome nota el Barcelona.